El rastro que deja una jornada de trabajo

El 18 de mayo en la sala Ricson del hangar, Laura Llaneli, editora de éste blog realizó una performance titulada Haz Tuyo Un Espacio. la pieza consiste en medir las dimensiones de un espacio con diferentes partes de su cuerpo; Cuando Laura medía, iba trazando líneas en las paredes, escalones y barandillas del lugar y al final de la línea escribía cuantos pies, dedos, culos, cuerpos o caras tenía de longitud.

La performance tuvo una duración de ocho horas en las que Laura estuvo contando y marcando paredes (cada hora cambiaba la parte del cuerpo con la que medía), pero la performance no consistía en que el público estuviese tantas horas como ella, de hecho nadie la vio completa, no hacía falta, incluso la mayoría del tiempo estuvo sola.

Lo realmente importante desde mi punto de vista era el rastro de esas ocho horas de trabajo, es decir para mi esta es una performance hecha más para la audiencia posterior, que ve las fotos o las líneas que siguen aún hoy en la sala Ricson, y tal vez para los que estáis ahora mismo leyendo esta entrada del blog.

Aunque también fue interesante para las personas que entraban en la sala y reseguían las líneas hasta encontrar a la performer, que podría estar con la cara contra el suelo o contando una infinidad de dedos en una pared.

Es interesante pensar en el hecho de que cuando había público, éste hacía que Laura se detuviera para explicar, entonces la performance se ponía en “pausa” cuando por fin tenía audiencia. O quizá todo hacía parte de la performance; el público entraba a ser parte cuando contaba sus propias historias o medía junto a Laura.

En mi opinión la performance no se trata solamente de saber cuantos pies, dedos culos, cuerpos o caras de Laura tenía de longitud la sala Ricson sinó que ca mas allá. de alguna manera Laura mostraba que su trabajo consiste también, como el de muchos otros, en trabajar todo el día.

Lina Bautista